Leo, el astronauta valiente
Un pequeño zorro astronauta encuentra el coraje para salvar su misión.
La misión de la Semilla Estelar

El astronauta Leo contemplaba la diminuta luna. «Qué silencio, Bolt», le susurró a su amigo robot. «Me siento un poco como “Coraje, el perro cobarde”». Bolt zumbó. «¡Ser astronauta es un gran trabajo! Pero tenemos una misión y mucha rica **comida de astronauta** para mantenernos fuertes».
Atrapados en el espacio

De repente, ¡FLASH! La nave se oscureció. Unas luces rojas parpadearon. «¡Oh, no!», gritó Leo. «¡Somos **astronautas atrapados en el espacio**!». Estaban a la deriva, como una botellita en un océano gigante y oscuro. El miedo le hizo cosquillas en su cola peluda.
Una caminata espacial valiente

«Un panel solar está suelto», pitó Bolt. «Debes salir. Ser **valiente** no significa que no tengas miedo. El verdadero **significado de coraje** es hacer lo correcto, incluso con las patas temblorosas». Leo respiró hondo. Flotando afuera, se sintió como un **astronauta en el océano** de estrellas. Estiró la mano y agarró el panel. ¡Lo consiguió!
Florece una nueva luz

Con la nave arreglada, aterrizaron. Leo plantó la Semilla Estelar. ¡Floreció en una flor brillante! Leo sintió una nueva palabra burbujear en su interior, un **sinónimo de coraje** perfecto: valiente. «Bolt», dijo, «¿sabías que la palabra para **astronauta en coreano** es 'uju bihaengsa'?». La pequeña luna ya no estaba oscura, todo gracias a un pequeño y valiente zorro.